martes, 3 de diciembre de 2013

STOP



Esto es lo que millones de personas, millones de Españoles han visto en los últimos años en lo que a sus carreras laborales se refiere, lo que estudiantes, recién licenciados ven día tras día después de años de estudio y sacrificio.

STOP! Es como un cese de tu progresión y a la vez de tus libertades. Esto es lo que perciben las personas que son despedidas.
Para la mayoría de ellos supone un alto en su ritmo vital, un alto en su evolución personal.
Para los jóvenes significa un parón en el ritmo de crecimiento y progresión.

Si, es cierto, hay soluciones, en muchos casos, la hay, cada uno puede ser emprendedor, y todos podemos reinventarnos a nosotros mismos. Estoy de acuerdo en eso; pero, ¿cómo podemos ser capaces de hacérselo ver a millones de personas que no solamente es el sentimiento de frustración tras años de servicio a una empresa, sino que es la hipoteca, la familia y demás problemas añadidos?

A muchos de los trabajadores que hoy se han quedado sin trabajo les preocupa qué hacer mañana, cómo hacer frente a las facturas, dónde ir a conseguir un empleo o con qué dinero tiro adelante un negocio y emprendo una nueva etapa.

Bien, en ese aspecto, en el de dónde conseguir un empleo o cómo subvencionarse para crear un propio negocio o proyecto los psicólogos poco podemos aportar.

Donde sí tenemos cabida es en apoyar o acompañar a esa gente a, en primer lugar ayudarles a aceptar el duelo que muchos de ellos viven día tras día, y preguntarles, sobretodo ¿qué necesitan? Y es que solamente ellos nos pueden decir lo que necesitan, y no estoy hablando de lo que ya es evidente, me refiero a lo que no saben a veces ni muchos de ellos, y es el miedo que esconde el paro, que para cada persona será diferente.

En esto sí que podemos hacer una gran labor, tanto des de la psicología como des del coaching, para ayudar a pensar en alternativas que muchos ni siquiera se han planteado todavía y que por más remotas que puedan parecer, pueden albergar una solución a su problema evidente.

Desde luego, echar la culpa al jefe, a los políticos, a los bancos, a los fraudulentos estafadores de poco servirá, ya que, pese a tener toda la razón en quejarse, ellos no le van a ayudar en devolverle el trabajo; es algo que solo depende de cada uno.

Tal y como yo lo veo, este país esta inmerso en una crisis, sí, en una crisis emocional, en una depresión colectiva. Es una realidad, pero, en este caso es una realidad emocional; o sea, no es una realidad física, no podemos palpar los bajos ánimos, la desesperanza, la angustia, la podemos PERCIBIR!

Y para todos aquellos que estáis leyendo esto tengo al menos una buena noticia: Las percepciones se pueden cambiar, modificar, alterar. Podemos decidir cambiar la forma en que percibimos el STOP.

Ese creo que es el primer paso que des de la psicología podemos hacer para ayudar a las personas que están en esta situación, en función de las necesidades de cada uno, para que empiecen al menos a sentirse fuertes, confiados y recuperar la visión de las alternativas de las que hablábamos antes.

Desde luego, vengo leyendo ya varias semanas en diferentes artículos que la sociedad española está esperando a que la crisis acabe para hacer exactamente lo mismo que hacían antes, es decir, lo que ellos llaman "vivir por encima de nuestras posibilidades". Yo por otro lado, espero y creo que en la mayoría no será así, que la gente ha escarmentado y que ha aprendido aquello que muchos de nuestros abuelos seguro que nos decían: "Si tienes 5 pesetas, gasta 4 y guarda 1, no gastes aquello que no tienes".

Creer en nosotros mismos. ¿Qué fácil no? ¿Creer en qué de nosotros? Pues bien, en el mundo del deporte hablamos de no centrarse en el resultado, sino en los objetivos, en lo que tengo que hacer para saber, para confiar que eso saldrá bien, lo cual acabo percibiendo que hay cosas que dependen de mí, de mi esfuerzo y dedicación, con lo que acabo confinando en mi mismo. Pues esto, señoras y señores viene a ser lo mismo. Centrarse en lo que de uno depende y en lo que uno puede hacer para percibir las cosas diferente es la mejor ayuda que ahora mismo os podéis prestar a cada uno para empezar, lo demás vendrá solo, o quien dice solo dice con el tiempo.

Pero no permitáis que vuestros miedos ocupen el lugar de vuestros sueños, el lugar de vuestras esperanzas, el lugar de vuestras ilusiones, y sobretodo, no permitáis que nadie nunca os diga que eso es imposible, que no se puede hacer, que no saldrá bien, porqué si creéis en vosotros mismos, haréis todo, incluso lo que hasta ese momento no se os había ocurrido por conseguir vuestros objetivos.


2 comentarios:

  1. Hola Sergi,

    Siguiendo las analogías con el deporte que muchas veces utilizas, me ha venido a la cabeza el discurso que ahora mismo está utilizando uno de los equipos más en forma de la Liga de Fútbol Profesional, el Atlético de Madrid y su filosofía de "Partido a partido", y que se puede aplicar a muchos temas que tratas.

    Muchas veces pecamos de ponernos metas lejanas, a muy largo plazo, que no nos hacen sentir presión, que no nos motivan a avanzar un paso cada día por verlas demasiado lejanas.

    Me parece una visión correcta y muy constructiva, marcarse metas inmediatas, ir paso a paso, partido a partido, día a día, haciendo pequeños méritos que nos vayan acercando a nuestro objetivo último, que por supuesto siempre tenemos presente.

    Cada día preocuparnos solo por lo que está en nuestras manos, sacarle partido a cada momento, a cada instante. Ganar todas las pequeñas batallas, que en algún momento nos harán ganar la gran guerra.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tu aportación Alvaro.

      Desde luego así es, el ejemplo del Atlético de Madrid es una oda al trabajo bien hecho por parte del equipo, el entrenador y el equipo que hay detrás, entre ellos los psicólogos y coachs deportivos, que ayudan a centrar los objetivos inmediatos y a establecer y clarificar lo que pretenden y qué es necesario para conseguirlo.

      Me parece una analogía de lo más acertada, enhorabuena y gracias por compartirla.

      Un abrazo.

      Eliminar